Recetario de mascarillas naturales

Carla González Alonso

La alimentación de nuestro cuerpo no incluye únicamente lo que ingerimos por la boca, sino también lo que aplicamos sobre nuestra piel. Contamos con alrededor de dos millones de poros, a los cuales constantemente bombardeamos con productos tóxicos o suciedad que no acostumbramos retirar por las noches. Con ello provocamos su saturación y damos la bienvenida a los famosos comedones o puntos negros.

Una forma de evitarlos es aplicar mascarillas 100% naturales que puedes preparar en la cocina de tu casa. Es recomendable aplicarlas una o dos veces por semana para obtener resultados efectivos. A mí me gusta dedicar mis domingos a consentirme, ¡y qué mejor que con esta saludable rutina!

La piel de nuestro rostro puede ser seca, mixta o grasa. ¿Cómo puedes saber qué tipo de piel tienes? ¡Es muy fácil!

• ¿Nunca te brilla el rostro? Piel seca.
• ¿Te brilla únicamente la zona T (frente, nariz y barbilla)? Piel mixta.
• ¿Te brilla todo el rostro al finalizar el día? Piel grasa.

A continuación te daré recetas de mascarillas naturales para cada tipo de piel.

Piel seca: aguacate, vitamina E y aceite de almendras

Ingredientes

• 1/2 aguacate
• 2 cucharadas de aceite de almendras
• 2 cápsulas de vitamina E

Vierte todos los ingredientes en un recipiente y revuelve hasta obtener una pasta homogénea. Después de lavar tu rostro, aplica la mezcla y déjala actuar durante treinta minutos. Retírala con agua tibia.

Piel mixta: jitomate y lechuga

Ingredientes

• 4 hojas de lechuga orejona
• 1 jitomate maduro
• 3 cucharadas soperas de agua

Tritura el jitomate maduro, las hojas de lechuga y el agua hasta conseguir que todos los ingredientes se integren. Lo primero que debes de hacer es limpiar tu cara con un exfoliante para piel mixta, pero revisa que los gránulos no sean muy gruesos para no irritarte. Una vez que seques tu piel, aplica una capa de la mascarilla por todo tu rostro. Déjala reposar durante quince minutos y enjuágala con agua tibia.

Piel grasa: avena y soya

Ingredientes

• 1 taza de harina de avena
• 3 cucharadas de aceite de soya
• Agua

Vierte una taza de harina de avena en un recipiente y añade tres cucharadas de aceite de soya. Revuelve hasta obtener una pasta. Agrega un poco de agua y mezcla bien todos los ingredientes hasta que se integren. Limpia tu rostro antes de aplicarla. Déjala actuar en tu piel durante quince minutos y retírala con agua tibia.