Dr. Rigoberto Arámburo, transformando vidas

ANGIE MUÑOZ

 

 

Originario de Mazatlán, Sinaloa el Dr. Arámburo es Especialista en Cirugía Plástica y Reconstructiva por el hospital Manuel Gea González. Actualmente el Dr. Rigoberto recibe pacientes de todo el mundo  en Ciudad de México y Mazatlán Sinaloa.

 

¿Quién es Rigoberto Arámburo?

«Soy un joven Sinaloense, cirujano plástico reconstructivo actualmente busco brindar a mis pacientes lo mejor en cuanto a técnicas quirúrgicas y reconstructivas, pero más allá de eso dar una excelente experiencia a mis pacientes. En México somos muchos cirujanos plásticos, sin embargo, lo que nos hace diferentes es la cercanía con el paciente, hacerlo sentir no solo como una persona que realizará un cambio en su cuerpo sino como un ser humanom, «la cirugía plástica tiene que ver no solo con el cuerpo sino con el alma».

 

¿Cómo es que empiezas tu carrera como cirujano plástico?

«Siempre estuve seguro que quería algo significativo en mi vida una manera de trascender y por supuesto que lo podía hacer con cualquier tipo de especialidad como: cirujano general (que fue la primera especialidad que hice), sin embargo cuando hacía una transformación de cuerpo podía mejorar muchas otras cosas, en la vida de las personas, en ese momento me di cuenta que quería dedicarme a eso, empezar mi formación como cirujano plástico, la cual significaba continuar con una especialidad de más de 4 años, y antes de eso debes hacer una especialidad de cirugía general que en algunos casos es de 2 a 4 años.

Una vez que terminé la especialidad, tuve la oportunidad de estar en centros muy importantes en Nueva York, Miami, Colombia y Suiza teniendo ese nivel de perfeccionamiento para poderle brindar a mis pacientes un resultado a lo que yo llamo,  “Un resultado estético superior”.

 

Siendo actualmente uno de los doctores plásticos más solicitados ¿Cómo es que logras balancear tu vida profesional con la personal?

«La realidad es que yo soy un médico de 24 horas es lo que siempre le comento a mis pacientes porque para mí esto no es un trabajo, es un estilo de vida, y es lo que hago diariamente por lo tanto no lo veo como un trabajo que debo cumplir, si balanceo mi vida, por supuesto que dedico tiempo a mi familia y mis amigos, me doy el tiempo para descansar, para recrearme, y seguir actualizandome, pero gran parte de mi día lo dedico a mis pacientes y a mí practica como cirujano plástico».

 

¿Cuál es tu percepción de la evolución de la cirugía plástica y reconstructiva en México?

«Actualmente en México tenemos grandes profesionales de la salud, grandes cirujanos plásticos que están utilizando muy buenas herramientas tanto de técnicas quirúrgicas como de tecnología,el cual me reconforta muchísimo. Como dato interesante a tus lectores; En México somos el cuarto país donde más se realizan cirugías plásticas en el mundo siendo los procedimientos más solicitados; la lipoescultura de alta definición, implantes de mama, abdominoplastia, rinoplastia y fi nalmente blefaroplastia. México está en una muy buena posición en cuanto cirugía plástica en el mundo».

 

¿Cuáles son los procedimientos estéticos que más te solicitan? y, ¿qué es lo más común que te piden las mujeres y los hombres?

«La lipoescultura es el procedimiento que más me solicitan, este sistema es para aquellas pacientes que tienen cierto sobrepeso o depósitos de grasa y necesitan moldear su cuerpo, existen esos pacientes que son delgados pero tienen depósitos muy específicos de grasa y en ellos se realiza una lipoescultura de alta definición. Definitivamente este procedimiento es el que más solicitan aquí en México y en todo el mundo. Uno de los procedimientos que más solicitan las mujeres es la lipoescultura, y los hombres solicitan con mayor frecuencia la rinoplastia, y la lipoescultura de alta definición donde se hacen marcajes específicos de los conocidos cuadritos, ese procedimiento lo llamo spartan body».

 

¿Cómo logras ganarte la confianza de tus pacientes y persuadirlos de lo que tú percibes es lo mejor para ellos?

“Creo que lo más importante es la sinceridad y la realidad, siempre les comento a mis pacientes “yo te voy a decir lo que tú necesitas”, no trato de decirles algo que no es real, incluso los pongo enfrente de un espejo y les voy diciendo que es lo que yo puedo mejorar, les puedo decir en qué parte van a quedar increíbles y en que otras quedará flacidez que ellos tendrán que mejorar con ejercicio, creo que al final ese vínculo de confianza sale de la sinceridad que se tiene durante una consulta medica. Actualmente muchos pacientes acuden con personas que no son cirujanos plásticos certificados son médicos generales que hicieron un entrenamiento en lipoescultura, y se dejan ir con este tipo de personas que no tienen los recursos ni los conocimientos ante una complicación».

 

¿Cuál es la causa más común por la que se operan tus pacientes? ¿salud o belleza?

“Definitivamente belleza, la mayoría de las personas vienen a operarse buscan una mejoría en su auto percepción y eso los ayuda a posicionarse en muchas otras áreas de su vida: trabajo, relaciones y calidad de vida en los pacientes».

 

¿Qué tipo de tecnología implementas en cada operación?

“Definitivamente el paciente de hoy es un paciente exigente que quiere un resultado estético superior, y a que me refiero con esto, antes por ejemplo los teléfonos celulares existían con cámara que no tenía buena resolución, pero hoy los celulares tienen muy buena resolución por lo tanto los pacientes son cada vez más exigentes. Para la lipoescultura yo utilizó un equipo de alta tecnología que se llama Váser, el cual vuelve liquida la grasa, esto me permite poder extraer la grasa de una manera más gentil sin dañar tanto al cuerpo, pero al mismo tiempo me permite generar definición en el cuerpo, tanto en la cintura, el abdomen, la espalda, los brazos en todas las partes del cuerpo. En el caso de la rinoplastia utilizo un ultrasonido que me permite que los cortes de los huesos de la nariz sean más nítidos, lo que también permite un resultado estético muy bueno. Definitivamente quien hoy se posiciona como cirujano plástico requiere de tecnología para poder lograr muy buenos resultados».

 

¿Qué opinas de la ideología de que las cirugías estéticas reflejan la falta de autoestima de los hombres y mujeres?

“Parte de nuestra autoestima es ayudarnos a sentirnos mejor, cuando una persona no se siente cómoda con su cuerpo, el hecho de tomar una acción para mejorarlo no significa que no tienes autoestima, al contrario la tienes aún hacia ti y la tienes para sentirte mejor, creo que actualmente las personas están más abiertas a realizarse cirugías plásticas por esa potencialización que esta genera en la calidad de vida».

 

¿Cuál ha sido tu mayor reto y tu mayor satisfacción a la hora de operar?

“Poder tener un resultado estético sin dañar el cuerpo de una persona, porque cuando una persona pone su cuerpo para operarse es un acto muy grande de confianza que uno como cirujano no debe de defraudar, entonces por hacer esa modificación en el cuerpo no puedes generar daño, esa es la parte más crítica de una cirugía, evidentemente cualquier persona que se realiza una cirugía plástica debe de saber que pueden existir complicaciones, pero uno como cirujano debe de ejecutar ciertos pasos para que no exista esta posibilidad.

Mi mayor satisfacción es ver entrar a mis pacientes después de una cirugía muy seguros con un gran vínculo afectivo conmigo, que se vuelven mis amigos después de la cirugía, que se sienten bien consigo mismo, esa es una de las mayores satisfacciones».

 

¿Crees que en México aún existe el tabú de la cirugía plástica?

“Definitivamente en México y en todo el mundo existen personas que son tachadas de ser operadas y es como mal visto; sin embargo, en estados del norte del país, yo, por ejemplo que soy de Sinaloa operarse es algo cultural, aquí en la CDMX todavía es tabú, de hecho la mayoría de las personas que vienen conmigo y son de la CDMX no tienen a nadie conocido que se haya realizado una cirugía mientras en las regiones del norte es muy común que tías, hermanas, amigas se han operado entonces el proceso es mucho más natural».

 

¿Podrías platicarnos de Arámburo Medical Spa?

“Nace de la necesidad de poder brindarle a mis pacientes una cartera de servicios orientada en mantener los resultados, pues creé Arámburu o Medical Spa en el cual ofrecemos tratamientos que son Colombianos y Brasileños para moldear el cuerpo, por ejemplo: las maderas, uno que se llama full reduction que incluye algunos aditamentos de Sculptice para poder tener una mejor defición de los marcajes en el abdomen, definitivamente esto es un complemento a todo lo que se hace en el quirófano brindando los mejores tratamientos. También el spa es para aquellas personas que no quieren realizarse una cirugía plástica, pero quieren hacer un cambio en su cuerpo».

 

¿Cómo surge la idea de llegar a más personas a través de “esculpiendo vidas” el podcast que haces junto con el Dr. Galasso?

“Actualmente esculpiendo vidas es un lugar donde resolvemos dudas acerca de la cirugía plástica, realmente no existía un espacio de ese tipo en México, existían algunos en Colombia, sin embargo, quisimos hacer algo muy dinámico de jóvenes cirujanos plásticos que buscan informar a las personas, me sorprende mucho cuando llegan a la consulta y ya saben cosas del abordaje y de las cosas que les voy a preguntar porque ya escucharon antes el podcast, de hecho tendremos la segunda temporada que va a contar con invitados masters donde hablaremos de temas muy específicos, no se lo pierdan».

 

Es admirable la labor altruista que haces a través de tu fundación ¿Cómo es que decides crear una asociación sin fines de lucro para niños con malformaciones congénitas?

“Yo me formé en el Hospital General Dr. Manuel Gea González en el sur de la Ciudad de México que es un centro de reconstrucción muy importante y allí operamos niños de todo tipo de enfermedades congénitas sobre todo de paladar hendido, y cuando egresé de esta institución  la gente me seguía buscando para realizar este tipo de operaciones entonces se creó la Fundación Mexicana de Cirugía Reconstructiva en la cual regalamos la cirugía por completo para este tipo de pacientes y los apoyamos, son poblaciones muy vulnerables que no tienen ningún tipo de seguridad social y que de verdad necesitan este tratamiento».

 

¿A quiénes admiras en otros ámbitos?

“A las personas que más admiro son a mis padres, no vengo de una familia millonaria, sino de clase media y todo ha sido una cultura del esfuerzo y hasta hoy ellos me apoyan en todas mis empresas y en todo lo que emprendo y otra persona que admiro mucho es Juan Pablo II era un líder nato que en su momento logró unir muchas cosas en la iglesia e inspirada paz».

 

¿Qué consejo les darías a todas aquellas personas que quieren someterse a una cirugía y por miedo no lo hacen?

 

“Lo primero es estar bien seguro de que quieres operarte, ya que lleva un proceso y no es un proceso corto, primero la toma de la decisión, posteriormente operarte y luego un postoperatorio aproximadamente entre un mes y mes y medio, lo segundo es buscar a un cirujano plástico que se encuentra certificado esto lo puedes encontrar en la página de la CMCPER que es el Consejo Mexicano de la Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva A.C. aparte de eso asegurarse de que el médico que los va a operar lo haga en un hospital, un lugar que cuente con todos los servicios en caso de alguna complicación sea atendida de manera inmediata y con todos los recursos».

 

Además de todo lo ya mencionado que otros proyectos tienes en puerta en este 2022

“Definitivamente seguir dando la calidad y experiencia para todos mis pacientes y vamos a lanzar una campaña que se llama “all for beauty” donde muestro las historias de algunas pacientes postoperadas y cómo su vida tuvo un crecimiento y por supuesto un plan de expansión por Estados Unidos para poder tener mayor turismo médico en nuestro país. En Estados Unidos una cirugía plástica es muy cara y a los pacientes les gusta viajar a México para someterse a una cirugía con la mejor calidad, muchos de los esfuerzos el siguiente año impulsarán el turismo médico en nuestro país».