Aceite de Coco: Usos, beneficios y controversias
Este aceite vegetal es uno de los más versátiles y prácticos en la naturaleza, ya que es quema grasa, ayuda a fortalecer el sistema inmune, mejora tu rutina de belleza, así como muchos otros beneficios que podríamos nombrar. Sin embargo, para usarlo de forma casera, hay que prestar atención en el qué, quién, cómo y dónde.
CARA
El aceite de coco tiene un alto comedogénico, lo que en otras palabras significa que no es favorecedor para pieles sensibles o propensas a imperfecciones, pues no penetra bien en los poros, obstruyéndolos y causando granitos.
El balance comedogénico en cosméticos está calificado del 1 al 5, sobre tu potencial de tener poros obstruidos: 1 es el nivel más bajo de obstrucción y 5 el nivel más alto. No obstante, esto no significa que cada uno de los ingredientes que uses te perjudicarán, ya que muchos otros factores deben tomarse en cuenta. Solo, ten cuidado la próxima vez que quieras ponerte una plasta de aceite de coco en tu cara, puesto que primero hay que hacer una evaluación del tipo de piel que tienes y así no te afecte.
COMIDA
En este caso, con más los beneficios que las malas noticias, ya que como siempre, todo es con medida.
El aceite de coco es alto en grasa saturada y aunque hay de grasas a grasas, este ingrediente es de los que más grasa saturada tiene. La siguiente tabla muestra el comparativo de una cucharada entre distintos aceites.
- Aceite de oliva extra virgen: 2 g.
- Aceite de coco virgen: 13 g.
- Aceite de canola: 1 g.
- Aceite de oliva puro: 2 g.
De acuerdo a un estudio por parte de la American Heart Association, las grasas saturadas pueden disparar las lipoproteínas de alta densidad, trayendo a la larga, consecuencias cardiovasculares, por lo que en todo caso, las personas con problemas de hipertensión y problemas cardiovasculares, deberán tener mayor cuidado. Y a pesar de que los aceites vegetales aportan muchos beneficios, es importante cuidar la cantidad que se ingerirá.
