Cómo crear un jardín Zen y por qué deberías tener uno en casa
Normalmente al mencionar la palabra jardín nos imaginamos un lugar lleno de pasto, plantas y flores, sin embargo, el jardín Zen es un lugar muy particular.
También conocido como Karesansui, los jardines Zen están conformados por elementos como piedras y arena, decoración escasa y un poco de vegetación colocada de manera estratégica para crear un ambiente minimalista de relajación.
El jardín Zen se origina en el siglo XII como un movimiento de paisajismo proveniente de China. Este tomó fuerza con el surgir de budismo Zen, en la creación de espacios ideales para generar tranquilidad, paz y armonía; en el cual se disfrutaría de la soledad, el silencio y la meditación en busca de la iluminación.
La intención del jardín Zen es crear canales con poca profundidad o espacios delimitados, en los cuales la arena al rastrillarla, creando patrones ondulados, representa el agua de ríos o mares. La arena, generalmente de color blanco, genera un espacio de vacío que permite una meditación dejando de lado las distracciones.
El uso de rocas hace semejanza a espacios naturales como islas, árboles o montañas. Las rocas son organizadas de forma equilibrada, pero siempre asimilando la asimetría, característica del jardín Zen.
Las plantas son escogidas cuidadosamente, predominan los colores verde, marrón, gris, blanco y negro y por lo general se usan especies como suculentas y plantas con flor, así como árboles de mediana estatura.
Si estás pensando en tener uno de estos jardines en casa te damos algunas razones para que no lo pienses más.
Ayudan a la relajación
Como te comentamos anteriormente, estos jardines están pensados para relajar la mente y el espíritu debido a sus elementos acomodados de manera única y estética.
Al dibujar la arena de manera ondulada alrededor de los elementos te relajarás y ayudarás a vaciar tu mente.
Ponlo en donde quieras
Puedes ubicar tu jardín en casi cualquier parte de tu casa o departamento, puedes crear un mini jardín Zen en cualquier rincón de la casa con lo mínimo para tener tu rincón de relajación.
Embellecen cualquier espacio
La manera en la que acomodes los elementos crearán todo un espectáculo en tu casa o patio, convirtiéndolo en un elemento decorativo sin necesidad de una gran inversión.
De fácil mantenimiento
Debido a su decoración minimalista, podrás tener tu jardín Zen y conservarlo perfecto con muy poco mantenimiento.
Manos a la obra ¡crea tu jardín Zen!
¿Ya estás decidido a crear tu propio espacio de relajación? Lo primero que debes tomar en cuenta es el lugar donde lo vas a ubicar. Esto te ayudará a determinar el diseño para la distribución de los elementos.
- Identifica los elementos que deseas incluir en tu jardín: plantas, piedras, decoración, arena, entre otros.
- Crea las delimitaciones entre los elementos del jardín para hacerlos resaltar individualmente.
- Escoge las plantas adecuadas, recuerda que deben tener colores específicos.
- La iluminación es importante, ya que debemos adecuarla para poder apreciar el jardín.
- Recuerda realizar los canales y ondulaciones en la arena usando rastrillos.
- Utiliza elementos fáciles de mantener como plantas de poco cuidado.
- Según el tamaño de tu jardín, puedes colocar bancos o espacios donde puedas sentarte.
- Crea espacios con sombra para disfrutar del jardín en cualquier momento del día.
- Las piedras, generalmente, se colocan separadas y en pequeños grupos para generar contraste.
- No olvides que la simplicidad es un toque determinante. Menos es más.